domingo, julio 27, 2008

LA ULTIMA ENTREVISTA DE MARULANDA

Despuntaba el año 2001 y yo me encontraba en San Vicente del Caguán reporteando o creyendo hacerlo sobre las conversaciones de paz que por entonces llevaban las FARC con el gobierno de Andrés Pastrana.

Yo era uno más entre el enjambre de periodistas colombianos que aquella mañana se vieron sorprendidos por la mismísima llegada a aquel potrero de Marulanda, quien luego de participar en una corta reunión con los delegados, se aproximó a la empalizada a saciar al montononón de periodistas destacados en el lugar.

En el bululú estaba yo con mi grabador encendido y colocado entre el pandemonio de micrófonos que indagaron hasta la saciedad a Marulanda.

Cuando ya Marulanda empezaba a despachar el encuestro y los reporteros a dispersarse, yo me quedé de último y no tuve mejor salida que decirle que era periodista venezolano y que necesitaba que me concediera una entrevista para hablar de Chávez.

Me clavó la mirada y al instante apenas me dijo: "Ahí vemos", y se largó.

Total que me fui a desgrabar la largar declaración que dio. Y como a la cinco de la tarde se forma a mis espaldas una gritería de gente preguntando por mí, pues dos guerrilleros me buscaban porque Marulanda me había mandado a buscar para que hiciéramos la entrevista, entrevista que por creerla imposible no tenía preperada.

Así que detrás del matorral, éstas fueron las preguntas que atiné a hacerle en una entrevista que era la primera que concedía en muchos años, y la última que concedió, ahora que ya se murió. En su momento fue publicada por la desaparecida revista Primicia.


¿Ha mantenido algún contacto directo con el presidente Chávez en alguna oportunidad?

-No, personalmente no he mantenido contacto con el presidente Chávez. Lo que sí puedo decir es que por Venezuela han pasado algunas delegaciones nuestras y eso para nosotros es saludable. En ese sentido, las relaciones irán mejorando.
¿El modelo revolucionario venezolano actual es un modelo a seguir?

-Es probable que sí, porque Chávez tiene como principio, filosofía o parte exponente de programación, el movimiento bolivariano. El movimiento bolivariano de nosotros lo aprobamos hace por ahí unos catorce años. En el 2000 hicimos el lanzamiento precisamente aquí, en El Caguán, un un potrero al que asistieron unas 30 mil personas. A mí se me ocurre que si ese movimiento bolivariano de allá, que ha sido base fundamental de su política para ser presidente de la República, se mantiene y tiene una verdadera programación en defensa de los intereses del pueblo, ese es un gobierno que va a salir adelante.
Sobre la paz: "La paz es un planteamiento desde que surgió el movimiento guerrillero en rechazo a la política de violencia oficial. Diferente que tengamos en la mesa dos concepciones: la del Estado y la del movimiento nuestro. Cada una tiene sus políticas. Uno quisiera que la paz llegara en ocho días, pero resulta que eso es discutiéndolo. No es fácil".

¿El movimiento bolivariano de ustedes ha sido cotejado con el venezolano?

-No, yo no conozco. Pero el hecho de que allá se tenga el movimiento bolivariano y aquí también, pues tiene que tener alguna coincidencia, porque no en vano tienen ese nombre. Lo que sí pensamos es que hay que hacer in intercambio para ver las coincidencias que permitan en un futuro trabajar conjuntamente. Eso hay que verlo, porque no hemos logrado todavía ese intercambio, y estaríamos dispuestos a buscar un mecanismo o condiciones para realizarlo y ver en qué coincidimos. Pero hasta ahora no.
¿Es un planteamiento de ustedes realizar esa reunión?

-Sí, tenenos pensado hacerlo, pero no sabemos en qué mes. Pero lo más importante es que una delegación de allá y una nuestra se reúnan en un lugar, sea en Colombia, Venezuela o la frontera, para lograr ese intercambio sobre los principios filosóficos que componen el movimiento bolivariano de ambas partes.
¿Las muestras de afecto que ha mostrado Chávez hacia la paz han sido retribuidas con el despeje de las fronteras venezolanas por parte de las FARC?

-Las relaciones entre el Presidente Chávez y las FARC, a través de personas que habitan cerca de la frontera, se han ido mejorando para ir acabando con tantas dificultades que se presentan, más que todo con el cuatrerismo, porque hay cuatreros en Venezuela que roban a nombre nuestro. El intercambio nos ayuda a evitar choques armados.

¿Siguen recibiendo venezolanos secuestrados por el hampa común de nuestro país?

-Hasta donde yo sé, no se ha hecho esa clase de negocio. Lo que sí sé es que han mejorado las situaciones, y que ya los que tenían ese pretexto, ya se les terminó.
¿El movimiento bolivariano de las FARC tiene aspiraciones de convertirse en un movimiento político a ir a una contienda electoral?

-Así es. La plataforma del movimiento bolivariano de las FARC es conducente a unificar a diversos sectores del país en el orden político, crear un movimiento grande hasta lograr que, cuando se den esas condiciones en el país, pueda salir a las plazas públicas a disputarse el poder con los partidos tradicionales. Esa es nuestra intención y estamos caminando hacia esa parte.
¿Pero lo harían sin deponer las armas?

-Cuando se den las condiciones. Mientras tanto es imposible; además, tampoco se cuenta con garantías, porque hay mucha gente que asesina a quienes no están comprometidos con la política, y mucho más a quienes sí hacen proselitismo.
¿Están preparados para sobrevivir al Plan Colombia?

-Toda la vida hemos vivido en condiciones difíciles. Tampoco podemos esperar cosas peores. Ahí vamos a ver cómo sobrevivimos; de todas maneras vamos a enfrentarlas.
¿Le parece una política de exterminio?

-Es una política para, a nombre del narcotráfico, terminar con todos los avances políticos que ha logrado este movimiento. Lo mismo que van a hacer con Venezuela, que la tienen amenazada dizque porque consideran que no es un gobierno en defensa de los intereses de Estados Unidos. De manera que no es solamente contra las FARC, sino también contra el presidente venezolano.